Mujeres y psicofármacos: una relación que va en aumento

Un 70% de los consumidores de psicofármacos son mujeres. Según las conclusiones de las Jornadas de Actualización en Medicina de Familia, la falta de afecto y las exigencias de una sociedad cada vez más competitiva son las culpables.

- Los psicofármacos son medicamentos de acción sedante. Se utilizan para tratar la ansiedad, el insomnio, la epilepsia, los ataques de pánico, etc.

- El principal problema de estos fármacos es la automedicación. Suele pasar que, a partir de una prescripción médica inicial, la misma pacienta pauta el medicamento de forma incorrecta, corriendo el riesgo de crearse dependencia, sobre todo, si se efectúa un consumo prolongado.

- Hay que tener en cuenta que, si se interrumpe el tratamiento de forma brusca, puede aparecer síndrome de abstinencia, con síntomas como insomnio, temblor, agitación, ataques de pánico, etc.

- Por el contrario, si el consumo está pautado por un médico y se disminuye la dosificación de forma gradual, no se produce esta dependencia.